RESEÑA #1 BERNHARD SCHLINK: MUJER BAJANDO UNA ESCALERA
¡Hola a todos y a todas! ¿Cómo
los trata esta tarde de domingo? Yo estoy cansada pero no me puedo quejar, salí
todo el fin de semana con amigos. Mañana vuelvo a la facultad después de casi
dos meses de vacaciones, sinceramente no tengo muchas ganas ya que estoy
trabajando y sé que va a ser un caos total pero algún día había que volver.
Hoy les traigo mi primera
reseña de un libro que me regalaron hace un tiempo para mi cumpleaños y por fin
lo terminé.
Mujer bajando una escalera
Título original: Mujer bajando una escalera
Autor: Bernhard Schlink
Editorial: Anagrama
Numero de páginas: 243
Género: ficción realista
Sinopsis
Una mujer baja una escalera.
La mujer está desnuda, su cuerpo es pálido, el vello del pubis y la cabellera
son rubios. Frente al fondo gris verdoso de una escalera y unas paredes
difusas, se presenta ante el observador con una levedad en suspenso. Al mismo
tiempo, con sus piernas largas, sus caderas redondeadas y plenas y sus firmes
pechos, posee una gravidez sensual. Ésa es la figura que aparece en un cuadro
del cotizadísimo pintor Karl Schwind. El protagonista y narrador de esta novela
lo contempla fascinado en un museo. La fascinación tiene un doble origen: la
obra llevaba décadas desaparecida, y además formó parte de la vida de quien nos
cuenta la historia.
Es un lienzo que conecta el
presente con el pasado, cuando él era un joven e ingenuo abogado y le asignaron
un caso que nadie en el bufete quería llevar. Un caso cuyo centro era ese
cuadro. Estaba deteriorado, dañado, y había una disputa entre el propietario
–el millonario Peter Gundlach–, el pintor y la mujer retratada –Irene Gundlach,
la joven esposa del millonario–. Y el inexperto abogado se vio envuelto en esa
historia triangular en la que no fue un mero testigo...
Con su prodigiosa capacidad
para narrar de un modo sencillo y ágil lo complejo, para penetrar con sutileza
en los recodos más secretos del alma humana, Bernhard Schlink nos regala una
novela sutil y prodigiosa que habla del amor, el arte, el engaño, la obsesión,
la posesión y la pérdida, el dolor, el peso de los recuerdos y las
oportunidades perdidas. De las pasiones y ardides alrededor de un valioso
cuadro que representa a una mujer desnuda bajando una escalera.
Opinión personal
Pensé mucho tiempo como
arrancar con esta reseña porque, mi mente quedo en blanco cuando termine de
leer la última página. Comienza bien, en la primera parte cuenta la historia de
vida de un abogado el cual ve un cuadro muy conocido y renombrado en una galería
de arte. Este cuadro le trae recuerdos de su vida pasada ya que tuvo un rol
importante en ella. A partir de ese momento queda en shock, cuando vuelve en si
se las arregla para encontrar a una persona en especial, Irene un personaje muy
interesante. Ella tiene las respuestas a muchas de las preguntas que se hace a sí
mismo, esas del estilo ¿Qué hubiera pasado si…
Me gustó la forma de plantear
la historia de Schlink, utiliza el recurso de los flashbacks y de esta forma va
entrelazando lo que sucedió en el pasado con que está sucediendo en el presente.
Fue muy difícil terminar de leer este libro, no porque fuera largo ni
complicado sino porque no logré conectarme con el personaje principal y eso era
clave. Creo que lo que me empujo a seguir leyendo fue que no entendía porque peleaban
dos hombres como Karl Schwind, un artista plástico famoso y Peter Gundlach, un
hombre millonario, con una esposa que cualquiera quisiera tener. Ahí estaba el
quid de la cuestión: la mujer del cuadro, Irene Gundlach.
Voy a ser completamente sincera:
la odié desde que Schlink le dio protagonismo en la historia. Su arrogancia y superficialidad
me daban ganas de revolear el libro, pero por suerte no lo hice. En la segunda
parte me enteré de muchísimas cosas sobre su vida y le tomé mucho cariño. Ustedes
pensaran ¿Qué fue lo que me hizo cambiar de opinión? Simple: ser ella misma,
una persona fuerte con todas las letras, segura de sí misma y con una ideología
propia que el resto de los personajes no puede comprender. De hecho, ella es quien,
en la tercera parte, hace que el protagonista se replantee las elecciones que
fue tomando a lo largo de su vida y como llego a ser quien es. Gracias a Irene
el evoluciona como persona.
Sobre Karl y Peter puedo
decirles que son dos personajes a quienes no les tuve ni les tengo estima, pero
fue agradable saber que evolucionaron con el pasar de los años.
En cuanto al final, me pareció
muy predecible y decepcionante. Estuve unos días frustrada por eso, pero como
les comenté antes, hay cosas que se pueden rescatar, por eso mismo creo que es
un buen libro aunque le faltó algo.
Valoración ★★★
¿Les gustaría leerlo? ¿Qué están
leyendo actualmente?
¡Besos!
Bel
Comentarios