Reseña: Las chicas de Emily Cline



Título original: The Girls.


Título en español: Las chicas. 

Autor/a: Emma Cline.

Número de páginas: 337.

Editorial: Anagrama.









California. Verano de 1969. Evie, una adolescente insegura y solitaria a punto de adentrarse en el incierto mundo de los adultos, se fija en un grupo de chicas en un parque: visten de un modo descuidado, van descalzas y parecen vivir felices y despreocupadas, al margen de las normas. Días después, un encuentro fortuito propiciará que una de esas chicas, –Suzanne, unos años mayor que ella,– la invite a acompañarlas. Viven en un rancho solitario y forman parte de una comuna que gira alrededor de Russell, músico frustrado, carismático, manipulador, líder, gurú.

Fascinada y perpleja, Evie se sumerge en una espiral de drogas psicodélicas y amor libre, de manipulación mental y sexual, que le hará perder el contacto con su familia y con el mundo exterior. Y la deriva de esa comuna que deviene secta dominada por una creciente paranoia desembocará en un acto de violencia bestial, extremo...

Esta novela es obra de una debutante que, dada su juventud, ha dejado boquiabierta a la crítica por la inusitada madurez con la que cincela la compleja psicología de sus personajes. Emma Cline construye un retrato excepcional de la fragilidad adolescente y del tormentoso proceso de hacerse adulto. También aborda el tema de la culpa y las decisiones que nos marcarán toda la vida. Y recrea aquellos años de paz y amor, de idealismo hippie, en los que germinaba un lado oscuro, muy oscuro. La autora se inspira libremente en un episodio célebre de la crónica negra americana: la matanza perpetrada por Charles Manson y su clan. Pero lo que le interesa no es la figura del psicópata demoníaco, sino algo mucho más perturbador: aquellas chicas angelicales que cometieron un crimen atroz y sin embargo durante el juicio no perdían la sonrisa... Sobre ellas —–¿qué les llevó a traspasar los límites?, ¿cuáles fueron las consecuencias de unos actos que las perseguirán siempre?—– versa esta novela que deslumbra e inquieta.





Advertencia: Esta es una opinión impopular, si el libro te gustó no te ofendas, no tengo la verdad universal, soy una persona más con ganas de expresar lo que siente por un libro (en este caso sentimientos negativos por desgracia). Están todxs avisadxs. 



 Voy a comenzar diciendo que me odio cuando caigo de rodillas por un libro hypeado y este libro es un traicionero más. La autora tenía todo para lograr una historia súper interesante, con personajes complejos, acción, sangre. Pero como se imaginarán, nada de eso sucedió.


Creo que una de las fallas más grandes que tiene este libro es que no te mueve para nada, y es la clase de libro que te tiene que hacer sufrir y horrorizar. De pre adolescente, la prota está confundida y no entiende nada de la vida ( lo que es normal) se obsesiona con los mosquitos que le pican las piernas  y despúes cuando la conocemos en el presente, de adulta, es una mujer que le teme a la vida y en ningún momento te enterás si algo, aunque sea una nimiedad la cambió, si evolucionó como personaje. Pasaron cosas terribles, escalosfriantes y a ella no se le movió ni un pelo.
 El estilo de escritura de Cline no es taaaan horrendo, por momentos me gustó (creo que es lo único positivo del libro) pero las descripciones no tenían sentido y las oraciones cortas menos.
Me hubiera gustado que le diera más importancia al desarrollo de los personajes y no tanto a su prosa.


Para simplificar las cosas les digo que no pasan demasiadas cosas en este libro, es puro humo, es decir, el marketing te vende un libro totalmente opuesto a lo que es: un bodrio. Yo quería sangre, sentir terror, dolor  del que vale la pena, si eso tiene sentido, pero nada che, planilandia es poco.

En cuanto al crimen, se resuelve súper apresurado en un octavo del libro, es decir que leí un libro de 400 páginas cuando podria haber leido 50 y no cambiaba nada.
  
Las preguntas sin respuestas me sacaron de quicio, por ejemplo sobre Suzanne, me hubiera gustado saber como y que pensaba sobretodo lo que estaba pasando, conocer bien a los miembros de la secta y porque creían en Randall (Charles) como si fuera un Dios ¿Qué los motivaba a hacerlo?  
Y entiendo que Charles Manson no es el tema principal acá pero hubiera sumado muchísimos puntos si Emma Cline le hubiera dado un poco de lugar [spoiler el es la mente atrás de las chicas, ellas son sus títeres, osea el es reeee importante    fin del spoiler]

 Y el final [spoiler ¡Que final más choto por el amor de Dios! Estaba casi segura de que Evie iba hablar sobre lo ocurrido y mandar a la cárcel a los bastardos hijos de puta. El hecho de que no delatara a sus amigos para no quedar mal parada y que no se hable de ella me dejo con un gusto amargo en la boca. Si a esta mujer no le importan los asesinatos brutales de los que casi fue testigo... ¿Por qué a mi me tendría que importar ella? fin del spoiler] No sentí lastima por Evie (la prota), la odié durante TODO el libro y hasta ella pudo haber sido la culpable del tremendo reading slump que tuve, más razones para odiarla, que la quemen en la hoguera
 
En resumen, creo que la premisa es lo que hace interesante al libro, Cline quizo sacar provecho de un crimen tan jodido como el de Charles Manson y su secta pero no supo como desarrollarlo para que me impactara, casi me lleva a un reading slump y tiene demasiadas páginas de relleno. No se los recomiendo al menos que sean masoquistas y quieran odiar personajes literarios





Merece:       

Comentarios

Entradas populares